LLORAR PARA SOLTAR

Este es un capitulo de un libro que me gusto mucho y que me ha hecho reflexionar y analizar la transformación en mi camino por esta vida, espero también sea de su agrado, el libro se titula “SI MAÑANA YA NO ESTOY” de Marisa Escribano.

LLORAR PARA SOLTAR

Las lágrimas son lluvia de emociones. Son descargas naturales de sentimientos que necesitan expresarse, y sirven para proteger al cuerpo de una sobrecarga de tristeza

CUANDO LA LENGUA YA NO ES CAPAZ DE EXPRESAR UNA EMOCIÓN YA SÓLO PUEDEN HABLAR LOS OJOS…

Los expertos dicen que el llanto es la forma en que el cuerpo libera sustancias toxicas que producen durante algún acontecimiento doloroso y son expulsadas de nuestro organismo en forma de lagrima. Por eso, cuando estamos tristes nos sentimos mejor después de haber llorado.

Según algunos estudios, las lágrimas derramadas por dolor emocional tienen una composición distinta a las que se derraman al cortar una cebolla; las lágrimas emocionales tienen más proteínas, adrenalina, endorfinas y otras hormonas.

Al llorar estamos haciendo una petición directa de ayuda, estamos diciendo que nos sentimos heridos es una forma de comunicarnos, es una manifestación de dolor profundo.

Llorar nos restablece, nos refleja nos devuelve la serenidad y una mirada más clara y en paz de los acontecimientos de nuestra vida, nos ayuda a ver la vida desde otra perspectiva.

Nos sentimos mejor después de haber llorado. No solo las mujeres debemos llorar sino también los hombres, porque quien no sabe o no puede llorar, inhibe todas las emociones que siente cuando esta herido y lleno de dolor. Es una forma de liberación.

Las pérdidas son la principal causa de llanto y gran parte de la recuperación personal implica saber llorar y despedirse. Solo hasta que no hayamos llorado nuestras penas no estaremos en condiciones de trascenderlas.

DEBE HABER ALGO EXTRAÑAMENTE SAGRADO EN LA SAL: ESTA EN NUESTRAS LAGRIMAS Y EN EL MAR “khalil Gibran”

Uno de los poemas que más me gustan es éste de santa Teresa de Ávila, porque de una manera simple pero contundente habla del valor que tiene el sufrimiento y de cómo nos ha traído hasta donde estamos en el momento presente de la vida, y es que todo tiene un motivo y una razón. A veces nos lleva mucho tiempo descubrirlo pero, con los años en la mayoría de los casos, descubrimos que ha valido la pena.

Sí para recobrar lo recobrado

tuve que haber perdido lo perdido

si para conseguir lo conseguido

Tuve que soportar lo soportado.

Si para estar ahora enamorado

fue menester haber estado herido

tengo por bien sufrido lo sufrido

tengo por bien llorado lo llorado.

Porque después de todo he comprendido

que no se goza bien lo gozado

sino después de haberlo padecido.

Porque después de todo he comprobado

que lo que el árbol tiene de florido

vive de lo que tiene sepultado.

Tiene razón la autora al dejarnos esta reflexión, en la lectura de otro de sus libros comenta que una de las etapas de la aceptación es aceptar la tristeza y llorar tanto como necesitemos y no dejar atrapados tantos sentimientos que quedan dentro de nosotros.

Después de la ausencia física, lo que sí puedo decirles es que tal vez aun no he llegado a la aceptación total, avanzo y retrocedo pero muy claro si me queda que:

LO QUE SE AMA …..JAMÁS SE PIERDE……

Es una colaboración de R.A.G.