PARA EL ESTUDIO, COMPRENSIÓN Y DIVULGACIÓN DEL CONOCIMIENTO ESPIRITUAL Y LOS PROCESOS DE LA MUERTE

PARA EL ESTUDIO, COMPRENSIÓN Y DIVULGACIÓN DEL CONOCIMIENTO ESPIRITUAL Y LOS PROCESOS DE LA MUERTE
¿DÓNDE ESTÁ LA VERDAD SINO EN TU PROPIO CORAZÓN?

sábado, 21 de enero de 2012

SOÑAR CON LA HIJA FALLECIDA

PASÉ AL LADO DE UNA HABITACIÓN QUE TENÍA LAS PUERTAS ABIERTAS DE PAR EN PAR. MIRÉ HACIA ADENTRO Y VI TRES CHICAS QUE BAILABAN EN CÍRCULO, DÁNDOSE LA MANO. UNA DE ELLAS SE PARECÍA A MI HIJA KATIE.

NO PUEDO EXPRESAR CON QUÉ ALEGRÍA ME REPETÍA UNA Y OTRA VEZ: «SÍ, SÍ, ES MI KATIE».

Las otras dos chicas parecían alejarse, pero yo sólo la veía a ella, y sus ojos…

No puedo explicar lo que ocurrió, pero ella estaba completamente tranquila y serena. No necesitábamos hablarnos ni tocarnos porque conocíamos instantáneamente nuestros pensamientos.

Nunca había sentido semejante paz, amor y felicidad. Cuando la miraba sólo me podía fijar en sus ojos. Ella poseía todo el conocimiento. De sus ojos se desprendía un indescriptible sentimiento de amor. No sé cuánto duró este «sueño».

Cuando me desperté por la mañana, al principio no reconocía mi habitación. No tenía ni idea de dónde había estado, pero sabía que mientras dormía no había estado en la habitación.

Si me preguntan si todo fue un sueño o si realmente estuve con Katie, la única respuesta que se me ocurre es que, en efecto, estuve con ella. No se parecía a nada de lo que había vivido antes.

Sentí una punzada en el corazón cuando me di cuenta de que volvía a estar sin ella. ¡Cómo me agradaría pasar otro momento así con mi querida y adorada hija!

Quisiera saber describir con precisión mi sueño. Sé que usted puede comprender la intensidad de la paz y el amor que fluía entre Katie y yo.

SER UN NIÑO ES CONOCER LA ALEGRÍA DE VIVIR.
TENER UN NIÑO ES CONOCER LA BELLEZA DE LA VIDA.

NO SÉ QUIÉN LO ESCRIBIÓ, PERO ME PARECE UNA GRAN VERDAD. CADA DÍA DOY GRACIAS A DIOS POR LO QUE EXPERIMENTÉ CON LA VIDA DE MI HIJA Y CON SU TRÁGICA MUERTE. GRACIAS POR PRESTARME ATENCIÓN… UNA VEZ MÁS.

EXTRACTO DE:
ELISABETH KUBLER-ROSS EN “LOS NIÑOS Y LA MUERTE”

No hay comentarios:

Publicar un comentario