Un rey se escondió para observar a sus trabajadores en el viñedo, y vio que uno de ellos laboraba con mayor dedicación y eficacia que los demás. Al mediodía el rey llamó a este trabajador y en amistad lo llevó a su palacio.
Cuando el rey les pagó a sus trabajadores al final del día también le pagó al que había trabajado medio periodo. Los trabajadores reclamaron. El rey entonces explicó:
—En pocas horas él realizó mucho más que ustedes en todo un día.
—En pocas horas él realizó mucho más que ustedes en todo un día.
La vida de un ser humano no debe ser medida por la cantidad de sus días en la tierra. Podrían ser medidas en la tarea realizada o tal vez en la huella que dejan en aquellos que sus vidas tocan. Una vida corta, una vida larga. ¿Cuál es la diferencia? Una vida llena de belleza.
Cuando un niño muere, los padres se lamentan y empiezan un proceso de duelo. Los padres afligidos experimentan muchos sentimientos: escepticismo, tristeza, soledad, temor, coraje, remordimiento, culpabilidad, desesperación y pérdida personal. Todos estos sentimientos son una parte de la reacción emocional llamada “pesar.”
Cuando un niño muere, los padres se lamentan y empiezan un proceso de duelo. Los padres afligidos experimentan muchos sentimientos: escepticismo, tristeza, soledad, temor, coraje, remordimiento, culpabilidad, desesperación y pérdida personal. Todos estos sentimientos son una parte de la reacción emocional llamada “pesar.”
A veces los sentimientos de pesar pueden ser tan intensos que los padres no entienden lo que está pasando y tienden a guardárselos dentro mientras otros pueden expresar su pesar fácil y abiertamente.
Aunque no hay ninguna “manera correcta” de sentir un duelo, muchos padres afligidos han encontrado que es útil tener algunos postes indicadores por el camino. Las pautas siguientes han sido preparadas por padres que han sufrido la muerte de un niño.
Los aspectos emocionales del dolor
• El dolor, junto con sus altibajos, dura más de lo que en general la sociedad reconoce. Sea paciente con usted mismo.
• El sufrimiento de cada persona es único. Usted y su cónyuge lo experimentarán, pero no tendrán la misma fuerza para soportarlo; es decir, reaccionarán diferente.
• El sentimiento de culpabilidad, ya sea real o imaginario, es parte normal de este doloroso proceso y puede expresarse en pensamientos tales como: “si yo hubiese…” o “si solamente…” etcétera. Exprese y comparta estos sentimientos y aprenda a perdonarse. La ira es otra reacción común. El enojo, al igual que la culpa, necesita expresarse y compartirse de una manera sana y aceptable
• El sufrimiento de cada persona es único. Usted y su cónyuge lo experimentarán, pero no tendrán la misma fuerza para soportarlo; es decir, reaccionarán diferente.
• El sentimiento de culpabilidad, ya sea real o imaginario, es parte normal de este doloroso proceso y puede expresarse en pensamientos tales como: “si yo hubiese…” o “si solamente…” etcétera. Exprese y comparta estos sentimientos y aprenda a perdonarse. La ira es otra reacción común. El enojo, al igual que la culpa, necesita expresarse y compartirse de una manera sana y aceptable
Los aspectos físicos del dolor
• Algunas reacciones físicas por la muerte de un hijo pueden ser pérdida o aumento de apetito, insomnio, dificultades sexuales, etcétera. Los padres, a veces pueden sentirse sin energía o incapaces de concentrarse. Es importante, durante este tiempo, que toda la familia tenga una dieta equilibrada ,descanso y ejercicio moderado.
• El llanto es aceptable y a la vez una expresión saludable de dolor por medio del cual se alivia la tensión nerviosa acumulada. Llore libremente hasta quedar satisfecho.
• Evite el uso de drogas o alcohol. Tome medicinas solamente en caso necesario y bajo supervisión médica. Algunas medicinas pueden crear dependencia; es decir, usted “sentirá” la necesidad de usarlas, y esto obstruye, demora o prolonga este periodo.
Decisiones
• Posponga decisiones importantes mientras sea posible (por ejemplo, cambio de domicilio, cambio de trabajo, etcétera) por lo menos por un año.
• Evite decisiones precipitadas acerca de los objetos de la persona fallecida. No permita que otros le apresuren o se posesionen de ellos. Usted lo puede hacer poco a poco cuando esté listo.
• El llanto es aceptable y a la vez una expresión saludable de dolor por medio del cual se alivia la tensión nerviosa acumulada. Llore libremente hasta quedar satisfecho.
• Evite el uso de drogas o alcohol. Tome medicinas solamente en caso necesario y bajo supervisión médica. Algunas medicinas pueden crear dependencia; es decir, usted “sentirá” la necesidad de usarlas, y esto obstruye, demora o prolonga este periodo.
Decisiones
• Posponga decisiones importantes mientras sea posible (por ejemplo, cambio de domicilio, cambio de trabajo, etcétera) por lo menos por un año.
• Evite decisiones precipitadas acerca de los objetos de la persona fallecida. No permita que otros le apresuren o se posesionen de ellos. Usted lo puede hacer poco a poco cuando esté listo.
Los días especiales
• Los días de fiesta, cumpleaños o aniversarios de la persona fallecida pueden ser momentos de tensión. Considere los sentimientos de toda la familia al planear estos días. Tome tiempo para sus necesidades emocionales.
• Sus amigos y familiares no se sentirán cómodos en su presencia ya que ellos desean aliviar su dolor pero no saben cómo. Tome usted la iniciativa y enséñeles. Hábleles acerca de su familiar fallecido para que se den cuenta que el tema es apropiado.
• Sus amigos y familiares no se sentirán cómodos en su presencia ya que ellos desean aliviar su dolor pero no saben cómo. Tome usted la iniciativa y enséñeles. Hábleles acerca de su familiar fallecido para que se den cuenta que el tema es apropiado.
Enfrentar el mañana
• Algunos padres piensan que ya no tienen por quien vivir y quisieran terminar con este gran dolor. Puede estar seguro que muchos padres se sienten de esta manera, pero el significado y propósito de la vida se pueden recuperar. El dolor disminuye poco a poco.
• La muerte de un hijo es a veces como un desafío a la fe o filosofía de la vida que los padres tienen. No se perturbe si usted se encuentra dudando de creencias antiguas, hable acerca de ellas. Para muchos, la fe ofrece la ayuda necesaria para aceptar lo inaceptable.
• Los padres afligidos y sus familias pueden encontrar consuelo y esperanza para el futuro cuando ellos reorganizan sus vidas de una manera positiva
CREO QUE LA MUERTE DE UN HIJO ES LO MÁS DOLOROSO QUE PUEDE EXISTIR EN UNA MADRE, MI HIJO PERDIÓ, A SU BEBE DE 6 MESES DE EDAD,POR NEGLIGENCIA MEDICA.VI SUFRIR A MI HIJO EN CARNE PROPIA, SIN PODER RESIGNARSE AL DOLOR, EL PADRE TAMBIÉN SUFRE EL DOLOR DE UNA MADRE, SON DOS LOS QUE SIENTEN EL DOLOR, PERO LA MADRE, NUNCA SE OLVIDA NI SE RESIGNA AL DOLOR DE PERDER UN HIJO.
ResponderEliminarLA VIDA CONTINUA DICEN MUCHO, PERO LAMENTABLEMENTE EL DOLOR QUEDA PARA SIEMPRE.
MARÍA.